Hablamos con la veterana y galardonada periodista afgana, Farida Nekzad, cofundadora de la agencia de noticias afgana Pjhwok Afghan News y directora del Centro para la Protección de las Periodistas Afganas (CPAWJ) única organización de este tipo que existe en Afganistan.
En nuestra conversación, mantenida por WhatsApp tras su salida de Afganistán, durante las esperas en el aeropuerto de Doha y su llegada a Toronto, ciudad en la que se encuentra en esto momentos, Farida Nekzad nos cuenta la grave situación en la que se encuentran las periodistas en su país y la cruda lucha que tienen por delante para conquistar de nuevo la libertad de prensa que han perdido y defender los derechos de las mujeres periodistas de su país, todo ello destruido con la toma del poder por parte de los Talibanes.
Farida, que ha tenido que salir como muchas otras colegas de su país ante el riesgo que corrían si permanecía allí, nos cuenta como muchas periodistas no han tenido su suerte y se encuentran en estos momentos en una situación de grave peligro “Las periodistas están realmente preocupadas porqué las están buscando”, nos dice y apunta “Necesitamos que Europa nos ayude a sacar a las periodistas de Afganistán. Aunque sé que es realmente difícil y a medida que pasan los días, todavía más. Europa siempre ha sido solidaria con los afganos y las afganas. Esperamos vuestra ayuda”.
En el momento de la publicación de esta entrevista, se ha anunciado que la Asociación de Anunciantes Suecos ha concedido a Farida Nekzad el Premio a la Libertad de Expresión y de Prensa 2021, por su defensa de estos valores y su valor en la lucha por los derechos de las periodistas afganas.
- Ilustramos esta entrevista con las fotos que la propia Farida Nekzad nos ha cedido
¿Farida cómo se encuentra?
Estoy agotada y necesito descansar. Estoy muy triste, lloro mucho cuando hablo con alguna de mis compañeras que se han quedado allí. Los talibanes cerraron nuestra oficina y todos los trabajadores de la ONG tuvieron que irse a su casa. Nuestra organización (CPAWJ) era la única destinada a defender los derechos de las mujeres periodistas afganas y los talibanes no quieren que haya ninguna mujer en los medios.
Tuve que irme porque estaba realmente en peligro. En mi vuelo de evacuación viajaban más de una decena de periodistas de medios locales y nacionales. Ustedes tienen que ayudarnos desde fuera a presionar a la comunidad internacional para que podamos evacuar a las que quedan dentro del país porqué corren peligro extremo. Por problemas de seguridad del aeropuerto no las pudimos sacar de manera segura. Muchas quedaron atrapadas tras la retirada de EEUU el 30 de agosto y todavía están esperando.
¿Sabe aproximadamente cuantas periodistas han quedado en el interior del país?
Imposible tener cifras concretas. He oído que Le Monde dice que quedan menos de cien. Creo que hay un grupo de unas treinta mujeres periodistas que esperan en el aeropuerto y otras tienen ya permiso de diferentes organismos internacionales. Precisar cifras en estos momentos es muy difícil.
¿Ha habido muchas represalias contra las mujeres periodistas?
Por desgracia, las mujeres periodistas de más alto nivel han marchado todas porque han visto que corrían un peligro extremo. Ellas durante su vida profesional estos años han escrito mucho sobre los talibanes y las violaciones de derechos que han producido. Muchas de ellas han escrito reportajes de investigación que muestra la idiosincrasia de los talibanes. Muchas mujeres periodistas los han descrito realmente como criminales que no se comportar como seres humanos.
Ahora están liderando el país y dicen que van a formar gobierno. Las mujeres periodistas están realmente preocupadas porqué las están buscando. Los talibanes tienen una lista completa, incluso de las que trabajan como activistas y las van a buscar casa por casa. No sé que pasará con las que encuentren porqué sabemos que muchas mujeres periodistas que siguen desapareciendo. Así que este es un gran problema, una gran preocupación que prueba que los talibanes nunca cambiarán y pueden tener cualquier reacción contra las mujeres periodistas en cualquier momento.
¿Qué otras posibilidades de salir de Afganistán tienen?
La situación es muy difícil para ellas. Muchas no tienen acceso al aeropuerto que es la única vía aérea. Para las que viajan a otra provincia o a otros países como Pakistán, en autobús o por carretera, es muy arriesgado. No hay garantía de lo que sucederá en el camino con los talibanes o con ISIS. ISIS está activo y AL Qaeda también lo está y los talibanes quieren detenerlos. Lo que deberían hacer los europeos es facilitar viajes seguros a un segundo país o desde Kabul acompañar a otros lugares para tomar los vuelos.
¿Tiene contacto con alguna de las compañeras que se ha quedado en el país?
Recibo a diario muchos mensajes de compañeras que están llorando porqué están amenazadas. Es una pesadilla. No puedo dormir. Puedes creerme Teresa he viajado más de dos días y dos noches en este segundo tramo del viaje de la salida del país. Ahora que hemos llegado al Canadá ya tengo comunicaciones de mujeres en el interior que piden que las ayudemos a salir. No puedo dormir bien, no he comido nada, todos mis pensamientos están con ellas.
Si desde GAMAG Europa ustedes pueden ayudar, a través de las organizaciones y sindicatos de periodistas internacionales presionando a la Comunidad Internacional, lo agradeceremos. Necesitamos que Europa nos ayude a sacar a las mujeres periodistas de Afganistán. Aunque sé que es realmente difícil y a medida que pasan los días, todavía más. Europa siempre ha sido solidaria con los afganos y las afganas. Esperamos vuestra ayuda.
Entrevista realizada por Teresa Carreras, coordinadora de Gamag Europa con la asistencia en la traducción de la compañera de GE, Laura Medina.